De: Pablo (Mensaje original) | Enviado: 04/05/2003 01:13 p.m. |
Esta
es una seleccion de dialogos del chaman Juan Matus con Castaneda que
están en sus primeros 4 libros transcritos si alteraciones y
reacomodados por temas. Un trabajo de sintesis de sus enseñanza
diseminadas en desorden en estos libros. Son palabras con poder.
Disfrútenlas.
-----------------------------------------------------------------------------
EL CAZADOR
He
estado enseñándote todo acerca de la caza para que te conviertas en un
cazador; pero también debes darte cuenta que todo cuanto haces es una
rutina. Piensas que todo el mundo es sencillo de entender; ahora podrías
disponerte a convertir de la caza, una rutina por igual. Hablas a
cierta hora, comes a cierta hora y te quedas dormido a cierta hora. Un
buen cazador conoce sobre todo una cosa: conoce las rutinas de su presa.
Eso es lo que hace un buen cazador. Si recuerdas el modo como te he ido
enseñando a cazar, tal vez entiendas lo que te digo. Primero te enseñé a
hacer e instalar trampas, luego te enseñé las rutinas de los animales
que perseguías y luego probamos las trampas contra sus rutinas. Esas
partes son las formas externas de la caza.
Ahora tengo que
enseñarte la parte final y definitivamente la mas difícil. Tal ves
pasarán años antes de que puedas decir que la entiendes y que eres un
cazador. Ser cazador es mucho mas que simplemente atrapar animales; una
cazador digno de serlo no captura animales porque pone trampas ni porque
conoce las rutinas de su presa sino porque él mismo no tiene rutinas.
Esa es su ventaja. No es de ningún modo como los animales que persigue,
fijos en rutinas pesadas y en caprichos previsibles; es libre, fluido e
imprevisible. Para ser cazador debes romper con las rutinas de tu vida.
Has progresado en la caza, has aprendido rápido y ahora puedes ver que
eres como tu presa: fácil de predecir. Un buen cazador cambia de
proceder tan a menudo como necesita pero deja muy pocas cosas al azar.
Estoy
hablando de caza, por lo tanto me interesan las cosas que los animales
hacen: los sitios donde comen; el lugar, el modo y la hora en que
duermen; donde y cómo anidan. Estas son las rutinas que te estoy
señalando para que tu puedas interesarte y notar las rutinas de tu
propio ser. Como te dije, tu a mi parecer, te comportas como tu presa.
Alguna ves en mi vida alguien me señaló lo mismo, de modo que no eres el
único. Un día descubrí que si quería ser un cazador, digno de
respetarme a mí mismo, tenía que cambiar mi forma de vivir. Todos nos
comportamos como la presa que perseguimos; eso, por supuesto, nos hace
presa de algún otro. El propósito de un cazador que sabe todo ésto, es
dejar de ser él mismo una presa. Para ser cazador, hay que estar en
perfecto equilibrio con todo lo demás, de lo contrario seria una faena
sin sentido. El miedo, por ejemplo, te convierte inmediatamente en una
presa. Ser cazador significa que uno sabe todo ésto. Significa que uno
puede ver el mundo de formas distintas. Un cazador no sólo debe conocer
los hábitos de su presa, también debe saber que en esta tierra hay
poderes que guían a los hombres, a los animales y a todo lo que vive;
poderes que guían nuestra vida y nuestra muerte. Por ello, ser cazador
no es tan sólo hacer trampas y colocarlas; un cazador vive siempre como
cazador para así obtener lo máximo de su vida.
CAZADOR DE PODER: GUERRERO
Cuando
logres vivir como cazador y puedas decir que eres un cazador, entonces
necesitas hacerte guerrero. Se podría decir que la diferencia entre un
cazador y un guerrero es que el cazador atrapa animales y el guerrero es
un cazador de poder. Lo que hace un guerrero es convertir su mundo en
su campo de caza. Como cazador el guerrero sabe que el mundo esta hecho
para usarse, de modo que lo usa hasta lo último. Un guerrero es un
cazador de poder.
El poder es un asunto muy peculiar; no puedo
decir con exactitud lo que realmente es. Es un sentimiento que uno tiene
sobre ciertas cosas. El poder es algo con lo cual un guerrero se las
ve. Al principio es un asunto increíble, traído a la mala; luego se
convierte en una cosa seria. No es nada y sin embargo, hace aparecer
maravillas delante de tus propios ojos. Finalmente el poder es algo
dentro de uno mismo, algo que controla nuestros actos y a la vez obedece
nuestros mandato. El poder dispone sus límites, y un guerrero es,
digamos, un prisionero del poder; un prisionero del poder que puede
hacer una decisión: la decisión de actuar como un guerrero impecable. El
poder se obtiene actuando como guerrero, es decir, cuando la vida se
toma como un desafío, se reúne suficiente poder personal. El poder
personal hace que el guerrero actúe en forma apropiada; un guerrero
confía en su poder personal sin importar que sea éste pequeño o grande.
Hacer esto significa ser impecable. Todo cuanto hacemos, todo cuanto
somos, descansa en nuestro poder personal. Si tenemos suficiente, una
palabra que se nos diga podría ser suficiente para cambiar el curso de
nuestra vida; pero si no tenemos suficiente poder personal, se nos puede
revelar la sabiduría más grande y nos importaría un ajo. A fin de
cuentas, quizá un guerrero no sea prisionero del poder sino su esclavo,
porque la decisión de ser impecable ya no es una decisión para él. Un
guerrero sigue los dictados del poder. El poder personal pertenece a
uno nada más. Un cazador de poder lo atrapa y luego lo guarda como su
hallazgo personal. Así, el poder personal crece y puede darse el caso de
que un guerrero, al tener tanto poder personal, se haga hombre de
conocimiento. El poder tiene la particularidad de que no se nota cuando
se le está guardando; si guardas suficiente poder, el mismo poder halla
para ti una buena razón para tenerlo. Te estoy enseñando todo lo que un
guerrero necesita para lanzarse a juntar poder por sí solo. El camino
del poder y del conocimiento es muy difícil y muy largo. Se necesita
luchar toda una vida para estar a solas con el mundo del poder. (continua en la respuesta)
|
|
Respuesta
|
|
De: Pablo | Enviado: 04/05/2003 01:15 p.m. |
ESTAR FUERA DEL ALCANCE - Ahora
bien, el arte del cazador es volverse inaccesible. Debes aprender a
ponerte voluntariamente al alcance y fuera del alcance. No se trata de
esconderte cuando todo mundo sabe que estas escondido. Tus problemas de
ahora surgen de ahí. Cuando estás escondido todo mundo lo sabe y cuando
no, te pones en medio del camino para que cualquiera te golpee. Un
guerrero nunca está disponible; nunca está parado en el camino esperando
las pedradas. Así corta al mínimo la posibilidad de lo imprevisto. En
una época de mi vida yo, al igual que tu, me ponía en medio del camino
una y otra vez, hasta que no quedaba nada de mi para ninguna cosa;
excepto, si acaso, para llorar. Pero un buen día me cansé y cambié de
manera definitiva. -
Digamos que un día, cuando me estaba haciendo
cazador, aprendí el secreto de estar al alcance y fuera del alcance.
Debes ponerte fuera del alcance. Debes rescatarte del medio del camino.
Todo tu ser está allí, de modo que no tiene caso esconderse; solo te
figuras que estas escondido. Estar en medio del camino significa que
todo mundo mira tus ires y venires. Ser inaccesible significa tocar lo
menos posible el mundo que te rodea. No usas ni exprimes a la gente
hasta dejarla en nada y menos a la gente que amas. Ponerse fuera del
alcance significa que evitas a propósito agotarte a ti mismo y a los
otros. Significa que no estas hambriento ni desesperado como aquel que
siente que no volverá a comer y devora toda la comida que puede. Un
cazador sabe que atraerá a sus trampas una y otra ves, así que no se
preocupa. Preocuparse es ponerse al alcance; y una ves que te preocupas
te aferras a cualquier cosa por desesperación; y una ves que te aferras,
forzosamente agotas a la persona o cosa a la que estás aferrado.
Así
pues, ser inaccesible no significa esconderse o andarse con secretos;
tampoco significa que no puedes tratar a la gente. Un cazador usa su
mundo lo menos posible y con ternura, sin importar que el mundo sean
cosas, plantas, animales, personas o poder. Un cazador tiene trato
íntimo con su mundo y sin embargo, es inaccesible a ese mismo mundo. Lo
toca suavemente; se queda cuanto necesita quedarse y luego se aleja
raudo sin dejar huella alguna. En eso consiste el secreto de los grandes
cazadores: en ponerse al alcance y fuera del alcance, justo en la
vuelta del camino.
EL CAMINO DEL GUERRERO
Tu espíritu está
desequilibrado, para contrarrestar esto, te enseño la vida del
guerrero. Pues bien, un guerrero empieza la faena con la certeza de que
su espíritu está en desequilibrio; pero a medida que va adquiriendo
poder y conocimiento, también va adquiriendo, lo mejor que puede, ese
equilibrio. En tu caso, como en la mayoría de los hombres, tu falta de
equilibrio se debe a la suma total de todas tus acciones. Tu espíritu
esta deformado; debes simplemente componerlo - purificarlo, hacerlo
perfecto- ya que en toda nuestra vida no hay otra tarea mas digna de
emprender. No arreglar el espíritu es buscar la muerte; y eso es igual
que no buscar nada, pues la muerte nos alcanzará de todos modos. Buscar
la perfección del espíritu es la única tarea digna de nuestra hombría.
Estás hecho pedazos y tienes que juntarte de nuevo.
Tu
alcahueteas para otros; no planeas tus propias batallas sino que las
batallas de desconocidos. Toda tu vida le has llevado la corriente a
todo el mundo y con eso, claro, crees colocarte automáticamente por
encima de todos y de todo. Pero tu mismo sabes que eso no es real. Eres
sólo un hombre y tu vida es demasiado breve para abarcar todas las
maravillas y todos los horrores de este mundo prodigioso. Por eso, tu
manera de darle cuerda a la gente es una cosa asquerosa que te hace
quedar muy mal; y al final, tus disculpas no tienen el poder de cancelar
tus actos.
No hay falla en el camino de guerrero; síguelo y
nadie podrá criticar tus actos. El camino del guerrero es acumular lo
que aprendes sin presumir nada y sin hacerte el piadoso. Hazlo así y
nadie podrá encontrar falla en lo que haces. Un guerrero siempre esta
listo. Ser un guerrero no es simplemente un asunto nada más de querer
serlo; es más bien una lucha interminable que seguirá hasta el último
instante de nuestras vidas.
Nadie nace guerrero, exactamente como
nadie nace siendo un ser racional, esclavo de la razón. Nosotros nos
hacemos lo uno o lo otro. En la vida del guerrero sólo hay una cosa, un
único asunto que en realidad no está decidido del todo: que tan lejos
puede uno avanzar en la senda del conocimiento y el poder. La alegría
del guerrero le viene de haber aceptado su destino y de haber calculado
de verdad lo que le espera. Un guerrero sólo debe estar preparado para
la batalla.
(continúa en la respuesta)
|
|
|
Nessun commento:
Posta un commento